El pimiento se ha convertido en un vegetal muy demandado por su versatilidad, especialmente los mini peppers, pues por su sabor dulce, son convenientes como snacks y para utilizarse en una gran variedad de recetas: crudos, asados, rellenos o como ingredientes coloridos en platos diversos; son atractivos para una amplia gama de consumidores.
México, es el segundo productor mundial de pimientos, con 3 millones 113 mil toneladas de pimiento producidos en 2022, sobre una superficie de 156,718 hectáreas (Hortidaily).
Además, lidera el ránking como mayor exportador de este cultivo, con una participación mundial del 29 por ciento y con Estados Unidos, Canadá y Reino Unido como principales destinos.
Por ello, los pimientos, con su versatilidad y demanda en el mercado, han encontrado en la hidroponía su medio ideal para crecimiento. Ricardo Ramírez, Grower de Hortícola Greenfield, comparte su experiencia y conocimientos sobre la producción hidropónica de pimientos, centrándose en el mini pepper, una variedad con la que ha trabajado durante los últimos 4 años.
EL CICLO DE PRODUCCIÓN
Ricardo nos da una introducción: “el ciclo anual abarca 38 semanas de producción activa, seguidas de 12 semanas de desarrollo. Durante este tiempo, monitoreamos cuidadosamente la calidad y tamaño de la fruta. El tamaño es un factor crucial para el éxito y le ponemos muchísima atención”.
Una de las claves del éxito en la producción de pimientos hidropónicos es la selección adecuada de variedades. En Hortícola Greenfield, se manejan 8 variedades, cada una con requisitos y técnicas de cultivo específicas, destacando entre ellas el mini pepper, manejo que es similar al del bell pepper.
Consideraciones técnicas principales:
1.- Selección de variedad: esta es la decisión más crítica que debe tomarse, ya que influirá en todos los aspectos del cultivo.
2.- Selección del sustrato: una proporción del 70/30 de fibra de coco es óptima para asegurar una adecuada aireación de las raíces y evitar problemas de humedad y enfermedades.
3.- Condiciones de temperatura: mantener una temperatura constante es fundamental para el desarrollo óptimo de los pimientos, con rangos específicos de 22.5 a 23 grados Celsius.
4.- Labores culturales: un manejo cuidadoso de la planta, incluyendo la poda y el riego, es esencial para promover un crecimiento saludable y una alta productividad.
5.- Fitosanidad: el control de plagas y enfermedades debe ser una prioridad, utilizando métodos integrados que incluyan el control biológico y biorracional para minimizar el uso de productos químicos.
Ricardo añade: “el pimiento se siente cómodo en el invernadero con un 60% de humedad relativa, de 400 a 600 ppm de CO2 y calefacción por tubería“.
Ventajas de producir pimientos en hidroponía:
1.- Mayores rendimientos: 27kg/m2.
2.- Producción 40% mayor que en suelo.
3.- Porcentaje de exportación es de alrededor del 90% y 95%.
De acuerdo con Ricardo, en cuanto a densidad señala: “nosotros traemos 3.2 plantas por metro cuadrado y en cada planta tenemos 3 tallos, dando un total de 9.6 tallos por metro cuadrado”.
De esta manera, la producción hidropónica de pimientos ofrece un camino hacia una agricultura más eficiente y sostenible. Con las consideraciones técnicas adecuadas, como la selección de variedades apropiadas, el manejo preciso del sustrato y el control cuidadoso del entorno de cultivo, los agricultores pueden cosechar no sólo mayores rendimientos, sino también beneficios económicos y ambientales a largo plazo.